Lo bueno, lo malo y lo peor II

Lo bueno: Llevar a un grupo de estudiantes mexicanos a presenciar un espectáculo vaquero tradicional en Oklahoma

Lo malo: Que el show no haya sido de nuestro completo agrado

Lo peor: Que los bandidos y maleantes del show fueran representados como MEXICANOS

Un poco más allá: Nuestra visita al pueblo vaquero de Pawnee Bill se realizó como parte de las actividades culturales que la gente de OSU planeó para nosotros. Después de estar todo el día ahi en el pueblo algunos ya estábamos algo aburridos y éste show no fué precisamente un broche de oro con el cual cerrar.

No me quejo para nada, pues la gente de Oklahoma siempre nos trató a las mil maravillas, sin ninguna vejación ni menosprecio, al contrario, se desvivían por nosotros. Al final de todo, ésta resultó ser la visita de la que más nos acordaremos, por todas las desventuras y las cosas graciosas que ahí nos ocurrieron, por la pena ajena del momento, por nuestro canto de México!! México!! mientras la matanza de «paisanos» sucedía, por la cara de verguenza del buen Danny Darnell (nuestro coordinador), etc.

We will always have Pawnee Bill

Estereotípico

Estereotipo: «En su uso moderno, un estereotipo es una imagen mental muy simplificada y con pocos detalles acerca de un grupo de gente que comparte ciertas cualidades características (o estereotípicas) y habilidades. El término se usa a menudo en un sentido negativo, considerándose que los estereotipos son creencias ilógicas que sólo se pueden cambiar mediante la educación…»

-De Wikipedia

Apenas ahora que buscaba la definición de «estereotipo» en la enciclopedia de la gente, me vengo a enterar que el término originalmente se utilizaba para denominar a una impresión tomada de un molde de plomo que se utilizaba en las imprentas en lugar del tipo original. Después fue que evolucionó en la metáfora que todos conocemos.

Los estereotipos están en todos lados. Forman parte integral de nuestra sociedad, de nuestra arte y cultura.

Así es, estamos en todos lados!!

Ahora que me encuentro un poco más al norte de lo acostumbrado, me ha tocado tener que ver de cerca a varios de los estereotipos que entre mexicanos y estadounidenses nos tenemos.

Hubo una situación en específico que me pareció muy divertida; fué algo así como un estereotipo recursivo. Sucedió que el segundo día de nuestra estancia aquí nos entregaron los libros de texto para las materias que estamos cursando. Al terminar, nos iban a llevar al walmart para comprar el mandado para cada apartamento. Entonces, uno de los sujetos del comité de bienvenida, un tipo regordete y buena onda, nos dice algo así como: ¿qué les parece? van a poder conocer Walmart!! Siendo que nosotros tenemos 3 tan sólo en la ciudad de Chihuahua.

Al tratar de hacer un comentario gracioso basado en el estereotipo de que todos en méxico andan en burro, traen sombrero y no son civilizados, lo único que hizo fué confirmar nuestro estereotipo de que la gente de Estados Unidos es inculta y carente de educación. Y bueno pues, sin rencores porque la verdad nos han tratado muy bien aquí y no me puedo quejar.

Para quedar tablas les platicaré otra cosa que sucedió, muy triste a mi parecer, y es que desgraciadamente han confirmado que la gente de México es impuntual (al menos en su mayoría). Es una imagen que deberíamos estar preocupados por tener, ya que eso no habla muy bien de nosotros que digamos.

En fin, siempre es muy divertido ver qué es lo que pasa cuando dos culturas se encuentran. Aún cuando no sean tan distantes geográficamente, a veces pueden ser diametralmente opuestas.

Tornado Watch

No, no es el título de un nuevo churro hollywoodense estelarizado por el clima adverso. Tampoco es un nuevo reloj impulsado por energía eólica (aunque pensándolo bien, no sería una idea tan mala). Tornado watch es el nombre código de un estado de alerta climatológico en EUA, y es el estado bajo el cual me encuentro actualmente

Para los lugareños parece algo completamente común, pero para uno que radica en un lugar donde el desastre natural más escandaloso es la sequía (que igual te mata, pero más lento) pues si le representa un shock. Tengo que confesar que a mí se me hace un poquito emocionante porque nunca me había tocado algo similar, pero pues mejor que no nos pegue por aquí cerca.

Clima sureño

Muchas son las cosas de las que me puedo quejar en mis escasas horas en el pequeño y pintoresco poblado de Stillwater, Oklahoma.

Cosas como el hecho de que nos hicimos 22 horas de viaje en lugar de las 15 que nos habían prometido gracias a las tardanzas en la solicitud de permisos o el bloqueo de un camino en las afueras de Texas. Cosas como la falta que me hace mi celular no digamos por la incomunicación, sino porque era la única manera en la que sabía en qué hora vivía. Y no se diga de las fotos…

Cosas como lo caro que está todo, y más aún en las tiendas de souvenirs de la Universidad. Cosas tan simples como el clima, que es caluroso y pegajoso, como de playa pero sin playa…

Y es de esta manera que me doy cuenta como podemos hacer que todo en esta vida sea miserable o magnífico para nosotros mismos. Todo tiene sus caras, sus contrapartes y versiones, sus altos y bajos. Pero la experiencia depende, en última instancia, de nosotros.

Pude escoger entre guardar lo malo que me ha pasado o darme cuenta de lo bueno que está pasando, tal como sucede en cada situación a la que nos enfrentamos. A menudo elegimos ser las víctimas porque es más cómodo, porque alguien herido merece lástima y ayuda de los demás; porque aquél a quien la «suerte» no sonrió recibe, en algún punto de su historia, el foco de atención sin realizar mayor esfuerzo. Culpamos a Dios en un intento de ocultar nuestro propio conformismo, así como el letargo mental y espiritual que nos embarga.

Yo prefiero quedarme con la belleza de uno de los campus con mejores instalaciones en la unión americana, con los nuevos amigos, con la hospitalidad de las autoridades locales, con la emoción que te inunda cuando tienes ante ti una oportunidad completamente nueva. Me queda claro que no todo en esta vida tiene un «lado bueno», pero ¿porqué aferrarnos a la derrota antes de pelear?